El primer paso es determinar el nombre que tendrán las cuentas de correo y crear la que será utilizada por el propietario del sitio. Se recomienda que esta tenga una longitud superior a 5 caracteres y conservar las mismas reglas de seguridad para la contraseña utilizada (más de 8 dígitos con al menos un número, una mayúscula, una minúscula y un símbolo).

Recomendamos siga una estructura similar con los nombres de las cuentas de correo.

El segundo paso será crear redireccionamientos de correo de cuentas auxiliares o cuyo uso se desea tener velado por cuestiones de seguridad. Uno de estos redireccionamientos de correo debe ser el de la cuenta principal (con la que accede al panel de control) y debe estar redireccionada hacia la cuenta del propietario del sitio a fin de que reciba notificaciones automáticas como puede ser avisos sobre seguridad de su cuenta. Otra cuenta común aunque no necesaria de crear como redireccionamiento, es la llamada cuenta webmaster que es una cuenta estándar para dirigirse al responsable del sitio; igualmente, redireccionada al usuario propietario del sitio.

Si no hay razón real para utilizar una cuenta de correo POP que reserve espacio en disco para dicho propósito, procure utilizar redireccionamientos, puede existir una gran cantidad de estos redireccionados a la misma cuenta, lo que permite reducir la administración de cuentas por parte suya.